La aproximación es casi nula. Tanto que el coche lo aparcas en la zona azul de la playa. Del coche a donde dejamos las cosas, unos 30 metros en total. Lo siguiente es aparcar justo donde escalas, jajaja.
Tengo que reconocer que la sensación de empezar a escalar en travesía y que se te vayan mojando los pies es bastante extraña, pero al tercer metro ya le has pillado el truco y te olvidas. Fuimos en travesía hasta la zona más alta, justo donde haríamos los mantle y de ahí un salto y al agua.
Primero hicimos una línea a la izquierda de la cueva, aparentemente la línea más fácil de la zona. Salió bastante bien y a la primera. Un poco extraño cuando sales del agua y la ola "te chupa" pero unas risas, un apretón y arriba.
Luego estuvimos probando la línea de la derecha tal como miras la cueva desde el agua, pero en los primeros intentos no salió, así que un respiro y fuera del agua a descansar.
Más tarde, en un segundo intento ya no hicimos la travesía sino que saltamos directamente al agua.
Intentamos entonces una línea a la derecha de la que habíamos hecho antes, tratando de salir por el diedro que se hace en la parte superior. Después de unos cuantos intentos, conseguí sacarme la línea, pero entre lo poco que habíamos estado fuera del agua, lo blandos que teníamos los dedos y lo que pinchaba la roca en algunos puntos, mi dedo sufrió un poco las consecuencias...
Mi hermano, después de buscarse su propio método para resolver el paso inicial también se sacó la línea. Bien Titán!!!
Al final estuvo jugando un poco con la travesía por arriba y lo dejamos. Un pequeño piscolabis y a casa. El único problema para mi hermano es que se le quedó el pie como al primo de Hulk.... un poco verde, jajaja.
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